No me cansaré nunca de repetir que crear una marca no es diseñar un logotipo, elegir unos colores corporativos o definir unos canales de distribución de unos productos. Efectivamente, crear una marca es todo eso pero haciéndolo sobre un exhaustivo trabajo previo que permitirá elegir el logotipo, los colores corporativos y la estrategia de distribución adecuados. Y ese trabajo previo del que quiero hablarte hoy no es otro que la estrategia de marca.
Para que una marca sea coherente, consistente y reconocible en el mercado, esté orientada a unos objetivos concretos y no dé volantazos en su trayectoria, es necesario definir cuál es la estrategia que va a seguir, una labor que debes dejar en manos de un consultor de marca con visión y experiencia en este campo. Y como eso es precisamente a lo que me dedico, hoy te enseñaré algunos aspectos claves de toda estrategia de marca.
¿Qué es una estrategia de marca?
Una estrategia de marca es un plan a medio y largo plazo que una marca debe trazar para desarrollarse de manera sólida y alcanzar unos objetivos específicos.
Involucra aspectos como los valores diferenciadores que tiene con respecto a su competencia y el lugar que quiere ocupar en la mente de sus consumidores, es decir, el posicionamiento que quiere tener.
No olvides nunca que, aunque tu marca se concrete en realidades tangibles (ese logotipo, esos colores corporativos…) es mucho más que eso: es algo intangible que la hace diferente al resto de productos o servicios que cubren las mismas necesidades o solucionan los mismos problemas. Por eso, una marca son las emociones, historias y experiencias de los consumidores. Así de sencillo y así de complejo.
¿Por qué es tan importante definir esta estrategia?
A continuación me gustaría compartir contigo por qué sin una estrategia de marca bien definida, tu marca nunca podrá ser una marca poderosa en el mercado. Y para ello te mostraré los cinco motivos principales por los que debes definir esta estrategia con la ayuda de un consultor de marca.
1.- Es el primer paso para que se establezcan vínculos emocionales con los consumidores:
Una persona adquiere el producto de una marca por primera vez porque necesita cubrir una necesidad o resolver un problema. Que a partir de entonces siga comprando esa marca depende exclusivamente de que la marca le aporte algo más, de que haya conectado con ella y de que le haya generado unas emociones únicas que originen la fidelidad a largo plazo.
2.- Sin estrategia de marca no hay asociación de ideas:
Cuando una marca está bien definida es posible promover una asociación de ideas, algo clave para que esté presente en la mente de los consumidores. Es como un atajo que ayuda a tomar la decisión de compra cuando hay muchas opciones, de ahí la importancia de contar con una estrategia clara y bien definida.
3.- Te permite diferenciarte de la competencia:
Ya sabes que encontrar el valor diferencial de tu negocio es el primer paso para diferenciarte de la competencia y en la estrategia de marca lo que se hace es precisamente buscar, plasmar y concretar cómo dar a conocer esa diferencia.
4.- Ayuda a no perder de vista los objetivos de marketing:
La innovación es necesaria, pero también seguir una línea coherente con tus valores y esencia. Al definir en la estrategia qué es tu marca, qué ofrece y cómo quiere estar en el mercado, tomarás siempre decisiones coherentes y adecuadas para alcanzar sus objetivos.
5.- Es el sustento de la estrategia de marketing:
De hecho, podemos decir que es la base en la que se apoya la estrategia de marketing al definir las acciones necesarias para que esa marca crezca y cumpla sus objetivos.
¿Quieres saber los pasos elementales que se deben dar para crear una estrategia de marca? ¿Crees que tu negocio está a la deriva precisamente porque no cuenta con una estrategia de marca bien planteada? Pues no esperes más: concertemos una cita para una primera llamada gratuita y valoremos cómo puedo ayudarte.