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¿Recuerdas ese famoso juego de mesa en el que a partir de preguntas y respuestas sobre su aspecto había que adivinar el personaje que se escondía en el tablero contrario? Pues algo parecido a un “Quién es quién” voy a hacer hoy para hablar de las cuatro caras de la identidad de una marca.
Porque como ya te he contado en varias ocasiones, la cantidad de términos que rodean al branding estratégico pueden resultar un tanto confusos, de ahí la importancia de aclarar de vez en cuando algunos conceptos. Y hoy la cosa va de identidad de marca: identidad visual, identidad verbal, identidad sensorial e identidad actitudinal, ¿quién es quién?
1.- La identidad visual
Es la identidad que entra por los ojos. La parte gráfica y audiovisual. Una serie de elementos que permiten reconocer una marca, siempre y cuando esté bien construida y haya conseguido crear un universo visual reconocible e identificable.
Hablar de identidad visual es hablar de logotipo, de tipografías corporativas, de colores corporativos, de selección de fotografías, de tratamiento de imágenes, de layouts compositivos… En definitiva, todos aquellos elementos audiovisuales que hacen posible que una marca se reconozca aunque no aparezca su nombre por ningún sitio. Es por lo tanto la identidad más tangible. Está definida en el manual de identidad corporativa de la marca.
2.- La identidad verbal
Como ya te conté en este post, la identidad verbal de una marca tiende a confundirse con su naming, pero lo cierto es que, aunque gira en gran parte a su alrededor, hace referencia a una dimensión más compleja. Es lo que leemos o escuchamos. Lo que llega a nuestro cerebro por cómo está dicho o contado.
La identidad verbal podría definirse como el nombre, el lenguaje y el conjunto de elementos escritos y auditivos que caracterizan la comunicación de una marca/producto/servicio. El naming, el eslogan, el tono de voz, el tipo de mensajes… son los elementos que le dan forma tangible y hacen que la marca tenga un universo verbal reconocible. Porque de eso se trata, de reconocer a una marca por sus mensajes, por cómo se comunica, por lo que dice, por su relato de marca… Eso es la identidad verbal que también debe quedar perfectamente definida en el manual de identidad corporativa.
3.- La identidad sensorial
Las actuales estrategias de branding tienen muy presentes que percibimos la marca a través de los cinco sentidos. De ahí que además de cuidar lo que se ve, se oye o se lee, es muy importante cuidar aquello que se percibe pero no se puede describir con palabras aunque se asocie a una marca, o concretamente a su identidad sensorial.
Las marcas transmiten cuando las tocamos, las olemos, las escuchamos…en definitiva, cuando las sentimos. Y esa capacidad para completar una identidad con otras sensaciones y emociones es crucial para generar fidelidad y hacer que una marca sea única. El branding sonoro, el branding olfativo, los mapas musicales, la ambientación en los PLV, detalles en la experiencia de compra o consumo… conforman esta otra dimensión que también debe definirse en el manual de identidad corporativa de una marca.
4.- La identidad actitudinal
Vivimos tiempos de cambios. Movimientos como el #metoo, la lucha contra el cambio climático o la defensa del colectivo LGTBIQ+ han hecho que, hoy en día, los consumidores quieran que las marcas se mojen y dejen clara cuál es su actitud hacia ciertas cuestiones. Quieren que definan cuáles son sus valores, sus principios, cómo actúan, cómo se comportan y cómo reaccionan ante determinados acontecimientos. Y eso es la identidad actitudinal de una marca, que para muchos es una extensión de la responsabilidad social corporativa.
Aunque es la gran olvidada dentro de las dimensiones de la identidad de marca, cada día cobra más peso porque, al fin y al cabo, define la personalidad de la marca y su forma de ser, algo que conecta directamente con los sentimientos de los consumidores. Trabajarla estratégicamente es clave en estos momentos, de ahí que deba definirse también en el manual de identidad corporativa de toda marca.
¿Tienes claro quién es quién dentro de las identidades de marca? ¿Están las de tu marca o negocio perfectamente definidas o necesitas ayuda? Si es así, ya sabes que puedes contar con mi asesoramiento experto como consultor estratégico de branding. Reserva tu cita por WhatsApp y comenzaremos juntos a darle una estrategia 360º a tu marca.